Fuentes de Inversión y Financiación para Startups
El emprendimiento empresarial está en auge, con un creciente número de personas que inician negocios por cuenta propia.
Afortunadamente, cada vez surgen más opciones para encontrar fondos y lanzar una empresa. Conocer estas diferentes opciones permite a los emprendedores elegir la que mejor se adapte a las necesidades de su negocio.
Asegurar la inversión y financiación adecuada para un proyecto puede ser un desafío que afecta el presupuesto y la salud financiera.
Sin embargo, a menudo se utilizan indistintamente, estos dos términos tienen significados distintos y representan diferentes aspectos del capital necesario para impulsar una empresa en sus etapas iniciales.
La financiación se refiere a los recursos monetarios o capital necesario para financiar las operaciones diarias y las necesidades a corto plazo de una empresa.
Por otro lado, la inversión implica la asignación de capital a largo plazo con la expectativa de obtener un rendimiento financiero o participación en la empresa.
Las fuentes de financiación para startups pueden incluir el capital propio de los fundadores o amigos y familiares que aportan recursos iniciales para lanzar el negocio.
Las 3F (family, friends, fools). Es una de las opciones más utilizadas por autónomos y emprendedores, y para algunos la única viable.
De ella van a surgir los fondos necesarios para la constitución y puesta en funcionamiento de la empresa, en caso de que el emprendedor no disponga de ellos.
Solicitar una pequeña inversión a familiares y amigos tiene como ventaja la posibilidad de acceder a fuentes de financiación que no te exigirán intereses ni interferirán, por lo general, en tu forma de gestionar el negocio.
Las fuentes de inversión para startups suelen ser más orientadas a inversores externos que buscan oportunidades de crecimiento y rentabilidad a largo plazo.
Estas fuentes pueden incluir inversores ángeles, firmas de capital de riesgo (venture capital), fondos de inversión y crowdfunding.
Business Angels (BA)
Son inversores individuales que financian proyectos emprendedores con su propio dinero, buscando obtener un alto rendimiento financiero en un plazo de 1 a 5 años.
Estas inversiones suelen tener un riesgo significativo, pero también ofrecen la posibilidad de obtener retornos de inversión muy superiores a otras opciones.
Además, los BA también pueden implicarse en el negocio aportando sus conocimientos y su experiencia empresarial.
En Valencia contamos con la asociación Big Ban Angels, que agrupa a los principales BA.
Venture Capital (VC)
Más conocido en España como “capital riesgo”, se trata de un modelo de financiación especialmente indicado para proyectos grandes con un potencial notable para el crecimiento.
Las inversiones suelen ser muy altas y consisten en adquirir una parte del activo de una empresa, aumentar así su valor y retirarse tan pronto como la inversión haya generado sus frutos.
Este modelo de financiación para las Startups o empresas es muy común en del sector tecnológico, y normalmente se lleva a cabo sobre compañías en fase de crecimiento.
Crowdfunding
Traducible como “micromecenazgo”, el crowdfunding consiste en conseguir financiación a partir de aportaciones de capital colectivas, y que se realizan en línea, a través de la Red.
Este tipo de financiación se consigue a través de plataformas que permiten descubrir y dar vida a proyectos originales. Si los proyectos llegan a los objetivos de recaudación, es decir, al capital que se necesita, entonces se obtiene la financiación para darles vida.
En Europa tenemos una de las mayores plataformas de crowdfunding del mundo, «Ulule«.
Esta plataforma ha conseguido en los últimos años más de 71 millones de euros de financiación en más de 29.000 proyectos creativos, solidarios e innovadores, con una tasa de éxito superior al 70%.
Las aceleradoras
Son instituciones que apoyan a las startups en su etapa inicial, ayudándolas a desarrollar su modelo de negocio, estrategia de captación de clientes y obtener financiación.
Las incubadoras
Brindan apoyo a las startups en su fase de fundación. Un ejemplo de aceleradora es CámaraTech, un programa de apoyo al emprendimiento que ofrece acompañamiento estratégico, mentoring, visibilidad y networking.
Además, actúa como puente entre emprendedores e inversores de impacto social, facilitando la financiación para aumentar el impacto positivo de las empresas participantes.
Por otro lado, las startups a menudo buscan financiamiento externo, a través de préstamos bancarios, líneas de crédito, subvenciones gubernamentales y programas de financiamiento específicos para empresas emergentes.
Financiación bancaria
Antes, solicitar un crédito o préstamo a un banco era la opción más común para los emprendedores. Sin embargo, en la actualidad, las opciones de financiación se han diversificado y el banco ya no es la única alternativa.
Los bancos suelen requerir garantías y es importante presentar un modelo de negocio completo y detallado al solicitar financiamiento.
Organismos Públicos
Algunas instituciones públicas brindan apoyo y asesoramiento a emprendedores. Busca el organismo público local encargado del emprendimiento. Ellos te ayudarán a elaborar tu plan de negocio y responderán tus preguntas sobre la financiación necesaria para tu startup.
Si experimentas retrasos en el proceso, también puedes acudir a la Cámara de Comercio local, quienes también pueden brindarte asesoramiento.
Existen distintas partidas, ayudas y subvenciones para emprendedores, pero es importante tener en cuenta que las subvenciones son incentivos económicos y no deben considerarse como la fuente principal de financiación.
En la mayoría de los casos, no se financia el proyecto al 100% incluso si se concede la subvención.
Sociedades de garantía recíproca (SGR)
Son entidades financieras sin ánimo de lucro y ámbito de actuación específico (por autonomías o, en menor medida, sectores) cuyo objeto es procurar el acceso al crédito de las pequeñas y medianas empresas.
Su idea es mejorar, en general, sus condiciones de financiación, a través de la prestación de avales ante bancos y cajas de ahorros, entre otros.
Las pymes se benefician de estas sociedades, ya que consiguen el aval que necesitan ante la entidad de crédito. La SGR responde, como avalista, en caso de fracaso, aportando, además de ofrecer el estudio y seguimiento de la viabilidad de la operación.
Existen diversas formas de inversión para emprendedores y startups, y la elección de la opción adecuada dependerá de factores como la etapa de desarrollo de la empresa, la industria y las metas financieras específicas.